Qué estrategias buscan las marcas para atraer inversores en un escenario económico complejo y cuáles son los formatos que lograron crecer en tiempos de coronavirus

Con más de 30 años de historia en Argentina, el negocio de las franquicias sobrevivió varias crisis y continúa demostrando su capacidad para adaptarse a contextos adversos. Esta vez, no solo tuvo que sortear un desafío en el plano económico, sino también en lo que refiere a salud por problemas derivados de la pandemia del Covid-19.

Aun así, algunas cadenas de franquicias encontraron la oportunidad para expandirse, proyectando importantes aperturas de cara al año que viene. Este proceso también está dando lugar a casos de reconversión donde marcas tradicionales se adaptan a un nuevo tipo de consumo que se vio impulsado bajo este escenario. Locales más chicos y de atención rápida, con un fuerte apalancamiento en las plataformas virtuales y con servicio de delivery a través de apps son algunos de los cambios que aparecieron con fuerza este año y vienen liderando la transformación del sector.

Buscarle la vuelta a las franquicias 

Las franquicias hoy en día son sistemas maduros que lograron evolucionar a lo largo del tiempo adaptándose a las distintas necesidades que fueron apareciendo en el mercado. Sus inicios estuvieron ligados a la llegada de las cadenas de Fast Food americanas a finales de los 80 y principios de los 90 a la Argentina.

Pero el modelo de franquicias nacional logró su expansión tras la crisis del 2001, cuando empresas extranjeras debieron irse del país y marcas argentinas comenzaron a ganar territorio.

Hoy en día las franquicias ya no solo implican una forma de autoempleo, sino que muchas ofrecen oportunidades de crecimiento a gran escala a quienes deciden invertir en ellas, contando con el respaldo de una sólida red detrás.

“El sistema de franquicias no tuvo tanta caída como los negocios independientes que registraron entre un 25% y un 30% de cierres. La Asociación de Franquicias registró alrededor de un 10% de cierres de franquicias, lo que para este contexto de crisis no implica un número importante”, señaló Carlos Canudas, titular de Estudio Canudas.

Según el especialista, entre los motivos de esta menor cantidad de cierres en el sector se encuentra, la posibilidad de contar con una estructura de peso que sostiene la inversión y tiene, en muchos casos, la capacidad de brindar ayudas económicas a sus franquiciados. También se debe a que muchas veces el franquiciado tiene la posibilidad de salirse de la misma y que los dueños de la marca pasen a gerenciarla u otro franquiciado se haga cargo del negocio.

Este contexto también dio lugar a la colaboración entre franquiciantes y gran cantidad de marcas empezaron a participar en foros de debates, comentando las estrategias implementadas para hacerle frente la crisis. Incluso algunas llegaron a generar alianzas entre sí con el objetivo de potenciarse.

El Noble tradicionalmente vendía empanadas, pizzas, chipás, y de repente hizo una alianza con Freddo y amplió la propuesta incluyendo helados de esta marca y toda la parte de cafetería, medialunas, churros, tortas y obviamente mesas y sillas en los locales para este nuevo público”, destacó Canudas.

Dark kitchens y Dark Stores

Es común que las personas asocien las franquicias a la gastronomía por ser las que mayor participación tienen en el mercado.

A su vez, el rubro fue uno de los más golpeados por la pandemia ya que depende en gran medida de la afluencia de personas a los locales. Sin embargo, también mostró su gran capacidad de reconversión para poder adaptarse a las nuevas tendencias de consumo, aprovechando al máximo las herramientas digitales.

“La imposibilidad de atender al público en los locales causó muchos perjuicios e incentivó a acelerar todo el tema de la venta digital. De ahí surgieron formatos nuevos y modelos de negocio bajo el paraguas de las mismas marcas y empezaron a otorgarse franquicias de venta digital que no requieren de un local para operar”, señaló Mario Comi, al frente de Francorp, desarrolladora de franquicias.

Aquí entra en juego el fenómeno de las Dark Kitchens y los Dark Stores que permitieron optimizar los costos operativos y de inversión en negocios. Como señala Canudas, se trata de franquicias que funcionan desde lo digital y empezaron a surgir de la mano de marcas consolidadas que buscaban llegar a nuevas zonas o abarcar una mayor cantidad de público, ahorrando costos. El manejo se hace con herramientas de marketing digital y el franquiciado tiene la posibilidad de dar a conocer la marca en la región y luego decidir si desea abrir o no una tienda física.

En el caso de las Dark Kitchens, se instalan pequeñas cocinas sin atención al público, donde se trabajaba con una o varias marcas gastronómicas que entregan la comida a través de las apps de delivery.

En Rosario, una de las primeras en incursionar en este modelo fue Pampa Picadas que en el mes de junio abrió una en el centro de Rosario donde no solo se elaboran productos de su marca, sino también de las marcas Bagels & Wraps y de Mundo Crepa.

En el caso de los Dark Stores, se trata de espacios ubicados en zonas generalmente de alto tráfico que se encargan de operar a través del e-commerce, abasteciendo a aquellas personas que compran de forma online.

Según la Asociación de Marcas y Franquicias (AAMF), durante la pandemia aparecieron 780 Dark Stores en el país y Canudas señaló que este tipo de tiendas también aparecen de la mano de importantes cadenas como en el caso de los supermercados, con locales que almacenan el stock destinado a los consumidores digitales.

Los negocios tradicionales ganan terreno

Al principio de la pandemia, con las medidas de cuarentena decretadas en todo el territorio nacional, los negocios de venta de productos esenciales fueron de los pocos que pudieron funcionar sin tener que cerrar en ningún momento sus puertas.

Esto hizo que las personas con un resto de capital decidieran invertir en negocios de este tipo como almacenes, carnicerías, dietéticas y petshops, los cuales también lograron expandirse a partir del modelo de franquicias.

“Hubo mucho crecimiento en las franquicias que abarcan todo el segmento de negocios tradicionales, pero sobre todo a partir de pequeños locales. Mientras que antes en este sector se daba mucho el avance del supermercadismo, ahora empezaron a crecer las franquicias de verdulerías, carnicerías, panaderías, dietéticas, pero siempre con un empuje muy fuerte de las redes sociales”, señaló Comi.

En el rubro carnicerías destaca la marca Res que lleva abiertas más de 100 sucursales en la provincia de Buenos Aires, la mayoría concentradas en Capital Federal. La inversión oscila entre los $4.500.000 a los $5.500.000 según modelo de negocio.

A nivel local se da el caso del grupo Familia Lequio, que anunció su nueva unidad de negocios: Al Fuego, una franquicia que incluye tiendas de carnes con venta de cortes envasados al vacío que ya arribó a la ciudad con un local en el Fisherton Plaza Chic Mall, y su grill house, donde las personas pueden degustar carnes con técnicas a la parrilla. Sus dueños tienen planeadas tres aperturas en el centro de Rosario para los próximos meses.

En lo que refiere a panificados, aparece el caso de Panadería Boutique, propiedad de Distribuidora Calzia, una empresa de congelados rosarinos. Esta cuenta con dos locales de gerencia propia, uno en el Mercado del Patio y el otro en la zona sur, más una franquicia en barrio Echesortu. La marca aseguró a Ecos365 que planean crecer bajo este modelo de negocios y realizar cuatro aperturas más durante el próximo año.

“Es un modelo muy particular y muy dinámico, ideal para estos tiempos. Son locales chicos, de 20 m2, que requieren que haya una sola persona atendiendo y con alrededor de 30 productos para la venta al público en modalidad take away, además todos se hornean en el momento. Es un formato muy económico y la estructura se la damos desde la parte digital, con mucha publicidad a través de redes sociales”, señaló Agustín Martinelli de Distribuidora Calzia.

En cuanto a dietéticas, una franquicia que aterrizó en suelo local en abril de este año es Oh my Veggie, que inauguró su tienda también en el Fisherton Plaza Chic Mall. La marca vende gran variedad de productos que van desde congelados, hasta alimentos de almacén y cosmética natural. Cuenta con sucursales en Buenos Aires, La Pampa, Neuquén, Córdoba, Entre Ríos, San Luis.

Comi aseguró que en la ciudad la marca ya proyecta una nueva apertura para la zona del centro.Una franquicia de este tipo oscila entre los $3.000.000 y $4.000.000.

Helados y Fast Food no se queda atrás

Las cadenas de comida rápida y las heladerías no se quedan atrás a la hora de abrir franquicias y de hecho se trata de dos rubros cuyo crecimiento se da, en la mayoría de los casos, a partir de este sistema. En cuanto a novedades, tanto la cadena de hambugueserías Mostaza como la clásica marca de helados Marbet contaron a Ecos365 sus planes de expansión a través de franquicias.

En el caso de Marbet, consiste en toda una nueva incursión para la empresa que hasta ahora venía trabajando solo con locales propios. La primera franquicia fue abierta unas semanas atrás en calle Presidente Roca 1783 y a esta se le sumará próximamente una segunda en la esquina de 3 de Febrero y Primero de Mayo. Pero además, Fredy, dueño de la marca, contó que se trata de una estrategia que tiene diagramadas varias aperturas en la ciudad para el 2021.

“El proyecto lo veníamos trabajando desde hace dos años, poniendo en condiciones la fábrica para poder afrontarlo. Veíamos que el tipo de negocio que tenemos se presta para el desarrollo de franquicias, nosotros ya desde hace tiempo le vendemos nuestro helado a locales que lo ofrecen bajo otro nombre, de ahí se nos ocurrió que podíamos empezar a producir para locales que lleven nuestra marca”, señaló el empresario.

En el caso de Mostaza, el director de expansión y desarrollo de Mostaza, Pablo De Marco, explicó que se trata de una estrategia comercial que tiene diagramadas las aperturas 100 locales en el país para los próximos cuatro años, lo que conllevará la creación de 4 mil puestos de trabajo. En cuanto a Rosario, se viene es la inauguración de una nueva sucursal a finales de diciembre en Pellegrini al 1400.

Pero, además, la marca se lanza al mercado con su nuevo modelo de franquicias “all in one”, adaptados al contexto de pandemia: “Se trata de locales modulares en una dimensión menor en metros cuadrados y con más posibilidades. Se puede comprar desde un auto, hasta pedir para take away, comer en el lugar, solicitar servicio de delivery y comprar a través de los tótems que no necesitan del contacto con empleados”, destacó De Marco.

A esta local se suman dos aperturas más pensadas para el primer semestre del 2021.

Fuente: https://www.rosario3.com/ecos365/noticias/El-negocio-de-las-franquicias-le-hace-frente-a-la-crisis-las-nuevas-tendencias-2021-20201204-0003.html